lunes, 20 de octubre de 2008

Pateras de lujo


Alegrarse de la muerte de un ser humano es de esas cosas que a veces se piensan, pero no se dicen. Por pudor, o porque si lo piensas dos veces no es algo de lo que estar orgulloso, ni algo que uno deba predicar. El caso es que por más que pienso, una y otra vez, no logro encontrar ni una sola razón como para no alegrarme profundamente de la muerte de Jörg Haider, el ultraderechista y xenófobo gobernador de Carintia, en Austria. Al parecer se estrelló con su mercedes ultimo modelo al ir a 160km/h por una carretera cuyo limite de velocidad era de solo 70. Se cree que iba bebido y venía de una fiesta.

Si consideramos su vuelta a casa como un viaje en pos de una vida mejor (qué mejor que el hogar para pasar la borrachera), se establece una curiosa similitud entre Haider el racista y todos aquellos inmigrantes que a diario se juegan la vida en pateras, en pos, también, de una vida mejor (convirtiendo así a su maltrecho mercedes en una especie de patera de lujo).
Que cruel metáfora morir en un viaje, al igual que todos aquellos a los que despreciaba en vida.

Un pequeño nazi menos para el mundo. Un gran paso para la humanidad.

2 comentarios:

Señorita Puri dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Sara Mansouri "Saroide" dijo...

brutal.