
Si somos tan irresponsables de no respetar los limites de velocidad, no nos merecemos más que el avance tecnológico de turno que nos impida ser idiotas. Y hablando de avances... ya era hora de que los coches aparcaran solos! como acaba de lanzar de serie una marca al mercado... este era una de las promesas de la ciencia ficción de mi infancia. Una promesa incumplida más junto con el coche volador, la comida en pildoras y el teletransporte... que ya era hora, vamos.
Pero además de tarde, encima se queda corto. Mi hermana, mente preclara e inteligente donde las haya, ya fue informada por mi hace tres años de semejante avance (cuando aun esta tecnología estaba en pañales y por tanto no disponible).
La escena fue la siguiente:
Pregunta: "¿Oye, sabes que han sacado un coche que se aparca solo?"
Respuesta: "Y como sabes dónde ha aparcado?"
Lo que os digo, una adelantada a su tiempo...
4 comentarios:
Bueno, hoy en día no basta con que se aparquen solos sino que además tienen que llevar suelto para la OPA, y encima conseguir echarlo en la máquina. No sé cómo se las van a apañar los japoneses para inventar esto... aunque lo harán, seguro.
bueno, pero atención al anuncio, porque eso es muy idílico, rollo Minessota, lo menos. Habría que ver el coche en Madrid. Tú ponle 17bolardos alrededor, pequeños y de acero galvanizado revestido de titanio, un árbol delante con una reja de metal, un bordillo de 30 centímetros y un ancho de calzada donde no cabe una furgoneta. El aparato empezaría a echar humo y finalmente petaría.
jajajajaja... creo que la letra pequeña pone que en Madrid se desconecta solo... es un cagao.
Ninguna tecnología me convencería tanto como la de una especie de gadgetomovil que se eleve y permita aparcar encima de otro coche, luego una plataforma incorporada te depositaría en tierra. Todo esto con tecnología punta de últma generación claro, que según lo cuento yo, parece muy cutre. Se me olvidaba que también debería ser ecológico, sostenible, reciclable...
Es que el barrio se me va a poner tan de moda que solo podré aparcar en mis más felices sueños.
Besos
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